El enemigo

Te amo tanto

que en el beneplácito

de tu ausencia interpuse un término

una trampa mortal

valhalla es una disidencia

Comparte el sueño de la ciudad
y se avecinan los límites del extranjero
así aprisiona la fatalidad con el terror

Y si no tiene noticias tuyas
no cree que hayas muerto
sólo espera a que regreses -y no huye-

Revisiona con dulzura cada instante
sin apenas disfrutar del presente
y cada día es un concepto -y no comprende-

Cómo saber si
admitiendo el sufrimiento
no nos será nunca tan certera la vida

Pensé que vendrías con la lluvia
y amanece sin noticias tuyas
pero no cree que hayas muerto

Sólo espera que no huyas
ya sólo espera a que no huyas
y si enunciarás o no la palabra arrepentida

Con el cuerpo de amapola
recóndito
exento de la aurora
la electricidad estética por establecer
se almacenan -como así trasciende-
todas las pulsiones,
y eres la incógnita

Si sobrevives de este modo
diáfana sombra de regreso

y que te condujeras iluminada hacia el territorio hostil
de mi mirada inspectora de variantes en tu rictus,
gesto, rostro, identidad, frente a la posición taimada
que comprende las circunstancias a posteriori
luego te sorprende y te domina el termómetro
de las proposiciones

II

Salvar todo vínculo ignoto
convertirse en el extraño
el pasajero del oráculo
sacrificar todo anhelo
y el revisionismo con perspectivas fraudulentas
sosteniendo a duras penas el recorrido inherente
a la memoria
poner un grado de conciencia frente al límite
de la desesperación
maldecir en los adentros
y pensar que todo es un tránsito hacia la muerte

El mar

Dudar
el enemigo silencioso
la carencia alterna de perspectiva
la alternativa

Purgar la herida

Quisiéramos para el olvido
un excusado

Para nosotros
una cláusula tipo "deshacer el hecho"
o "deshacer el daño"
por si el arrepentido hace acto de presencia

Y le ponemos imposible por nombre al principio
que es únicamente el bastión de la defensa

Vienen
desatados y voraces
acordes los tiempos
y la desesperanza
para ellos quisiéramos un desafío
un lugar imposible en lo más alto
una cima inalcanzable
y sangre y sudor y sangre
heridas insanas
palabras que no se hayan
en ningún vocabulario

Actúa el silencio
acata la orden

No digáis jamás
quién ama
a quien amar

Perdón que no compete al tiempo
ni al mar ni al océano
instante indefinido
caprichoso azar que ha decidido
volver a amarte
volverte a amar

De la esperanza

La niegas, no la practicas
sobre todo porque te hiere
y ahora no es aliada
sino subversiva.
Te aleja de los nombres
-resquicios latentes de lo inmediato-
hacia el agujero negro del pasado
Y tú, huyes porque has decidido
sabiamente, los destinos del olvido
pero -porque en todas las huidas
hay uno o varios- le preguntas
a ella, por si te responde
la besas, por si corresponde
la amas un instante cierto
que sólo admites como tal
en la réplica.
Y pides perdón por la tentativa
de homicidio frustrado
y ahora la quieres como aliada
no como precursora de los pronombres
pero -porque en todas las renuncias
hay uno o varios- ella te responde;
-No voy a ser una fecha de calendario
ni una muestra de tu obituario

1ª Elección

Eres como el mar

-Pensaba...

Estás ahí por si te necesito, estás ahí si te busco, estás ahí siempre
eterno, inmenso, místico.
Y me invades, sabiéndote curación
oráculo y horizonte
a la vez que te defiendes de la ausencia
implacable asesino, devorador de sueños,
límite de los hombres.
Eres como el mar

-Pensaba mientras le decía hasta pronto.

Que para él siempre era un adiós premonitorio,
un hasta nunca en potencia.

I

Elegimos.
Y eso nos convierte en cobardes
o en valientes.
Elegimos.
Y eso nos convierte en lo que somos.

Instrucciones de uso

Modo de empleo para convertir el amor
en un aserradero de promesas;

no escribo para ti, ni dominas
con soltura el idioma que hablaba
del pasado

tú sólo eres la corteza de una época triste
la que preconiza un gran amor de tránsito
la que desaparece siempre por las líneas divisorias
y los márgenes de la certeza
la que nunca trabajó demasiado
la terrible asignatura de quererme

si sólo aspiras al convenio macerado
de las dicciones del amor
y el sobrenombre

Y así como libelos que escapan de libélulas
languideces

Porque es un instante sin respuestas
una posición sin coordenadas
un clamor de multitudes en silencio
las lágrimas de amor despedazadas

Consciente de que esperé
al ángel sonriente y a la incógnita
de su vuelo. Aliciente vital, constelación alada,
repercusión,
catálogo de proverbios, ayuda de imprevistos,
concierto de silencios,
silencios de despecho.

Ver en el amor
que todas las líneas concuerdan
hacia el salto definitivo
de todo sobrenombre

Inesperanza

Y así aprendes lo imperdonable
que la demora del tiempo
no esta dispuesta a olvidar
que el corazón de las tinieblas es un clásico y también
un testigo inasible

la conducta a extinguir era el amor
porque despues de la pregunta sólo queda el tránsito
¿y ahora qué? ¿qué voy a hacer con mi vida?

-Vivirla.
Dijo el destino. (Yo te ayudaré)

Sólo un instante, precavido ante la errónea disposición del elemento
sólo un instante de belleza traspasará tu rostro efímero hacia donde
con lenguas irascibles de trascender convierta el horizonte
en una línea tránsfuga

Anotas que la franqueza era un objetivo preliminar
el amor que ahora veo en otros como antes vieron en mí
ineficaz tranxilium hacia la esperanza

Distancia

Por qué ya no creo en el amor
si eres una oportunidad distante
porque ya no creo en el amor

este no era el viaje de las respuestas

si te revelas indómita aparición de sodomitas

para los que la suerte no urdió un plan de modestia impertérrita
para los que la palabra siempre sólo dignificó el designio

busco en ti como en las otras ese rasgo,
el rastro certero de los corazones humildes
pero busco en ellas lo que me mostraste un día sin más ambagajes
ni motores ambiguos
que podía ser yo y al mismo tiempo amarte
siendo tú
ahora que todo me parece una oportunidad que siempre decelero
por excentricidades
ahora que los viajes han olvidado su papel de oráculo

tú sólo respondes desde una cercanía que no puede tocarme
que sólo alcanza a herirme con la distancia
y ya no estás ya no estás ya no estás
breve intrépida, aclaración matemática,
hoja de cálculo, hoja de ruta, estrépito
que no perdona las cuentas y el destierro.

Sobrevivo porque cada mañana improviso un sueño
porque cada noche atisbo un desencuentro
porque cada por qué invoca una lápida.

Agnosia

Por eso tú

que eres casi un sueño

con límite de horizonte

donde imponerte levemente

la plenitud de la serpiente

así como el placer de las noches

regresas porque no recuerda

tu obcecación ni los pronombres

pero rememora lo esencial

que convertido en distancia

se violenta efímero

Significado de una pérdida

Y si estás perdida

que no es un estado de ánimo
sino un momento de conciencia

abandona ahora la pérdida
o acude al momento-instante
pero sin permitir la asfixia
ni la laxitud
sin permitirte ni una lágrima
ya sea por eficacia
ya sea por tradición

que lo que no llores ahora
sólo es un camino de vuelta
con señales e indicios
de la altura exacta
de la herida
del dolor
de la entraña
de lo que se extraña siempre
de lo que nunca nos abandona;
el pasado

Con el corazón en la mano
que es la forma deshonesta
del péndulo
el asir de la materia
al engranaje fugaz del hecho
asombra el egoísmo y la ternura
porque sólo el egoísmo genera libertad
con la ternura del que lo hace sin inquina
como si no supiese o no hubiera otra salida

con el corazón en la mano
que es como si dijéramos
con las lágrimas acechando el párpado